El libro de los Proverbios es riquísimo y repleto de sabiduría. Era necesario dividir y separar sus mensajes en capítulos que contuvieran temas para la vida espiritual, familiar, social, profesional, etc. Fue lo que hicimos…¡que riqueza! Mi vida y mi familia mejoraron a partir de la lectura del Libro de los Proverbios. ¿No quiere que su vida y la de su familia también mejoren? Entonces léalo de corazón abierto y con fe. Ponga en acción la palabra leída y sienta el poder de Dios actuando en usted y en sus seres queridos… “Guarda hijo mío, mis palabras, conserva como un tesoro mis mandatos. Guarda mis mandatos y vivirás” (Pr 7, 1-2a).